Amor perfectamente imperfecto.

Martínez Hernández Guadalupe Ana Gabriela 1MM1

Lucía es una joven de 28 años de edad, exitosa profesionista egresada de una de las mejores escuelas de bioelectrónica en el mundo, con diversas líneas de investigación. Ha recibido innumerables reconocimientos por muchos de sus proyectos, su vida dentro de las cuatro paredes de su laboratorio es bastante satisfactoria.

Fuera de ella, Lucía es hija de un Astrónomo importante, amante de la ciencia y la tecnología. Su madre es una mujer conservadora y hogareña, licenciada en Administración de Empresas pero que jamás ejerció su carrera por causa de la familia que con Lucía y su marido formo.

Lucía ha vivido momentos increíbles en su vida y muchos de ellos los ha realizado en compañía de Ramón, un joven creativo y soñador que conoció en unas vacaciones. Ambos formaron una feliz pareja, que prometía llenar de dicha a las familias de ambos quienes teniendo hijos únicos en sus hogares, veían en esa relación su esperanza de un primer nieto.

Ramón era profesor de literatura en una Universidad de la Ciudad, sin embargo, su sueño era poder entrar a una academia de Pintura y Arte gótica en Paris a terminar sus estudios en el ramo y convertirse así en un gran Pintor de la época. La oportunidad del joven se concreto cuando éste conoció al padre de uno de sus alumnos, quien era hermano de un profesor de aquella fabulosa escuela. Ramón al ayudar al hijo del Sr. a desarrollar todos sus talentos de una manera asombrosa, fue ganando el aprecio del Padre, que sin dudarlo le ofreció la posibilidad de una beca.

Ramón no pierde su oportunidad y se entrevista con el Profesor de la escuela en Paris, éste le ofrece una prueba y la posibilidad de una media beca, el joven accede y tras una serie de exámenes es aceptado pero su media beca no era suficiente y considerando que estaba a punto de cumplir su sueño, invierte todos sus ahorros en esta travesía, sacrificando incluso el dinero que tenía destinado a su boda con Lucía.

Lucy al ver que su novio no solo se aleja de ella, sino que también sacrifica una vida juntos, cae en total depresión e incluso deja en pausa todos sus proyectos de investigación. Ramón intenta explicarle a su amada, sin embargo ella no entiende razones, simplemente termina todo compromiso con el joven y pierde contacto con él.

Desilusionada de toda posibilidad de hacer realidad su sueño de una familia con Ramón, Lucy renuncia a su empleo en uno de los mejores laboratorios y centros de investigación de la Ciudad y deja truncado uno de los proyectos más importantes de la época, un corazón artificial.

Lucía vive un año de infierno, no come, duerme muy poco y vive con la esperanza de que Ramón entre por la puerta y le diga que está dispuesto a dejar todo por ella. La familia se muestra angustiada, y desolada por la vida que su hija ha dejado marchar, llama a Ramón hasta a Francia. El chico comenta que su vida va en ascenso y que su amor por Lucía no ha dejado de existir, pero su corazón está dañado por la falta de apoyo que ella le ofreció.

La Madre de Lucía le pide al joven que la llame e intente reanimarla, el Padre de la joven no aprueba esta situación y pide al joven que no le acerque de nuevo a su hija pues le ha hecho la vida miserable. Ramón hace cado omiso a este hecho y llama a la joven, ella recibe la llamada que tanto esperaba, pero no con el mensaje que esperaba; “Lucy, te llamo para decirte que te quiero, me está yendo de maravilla, estoy a punto de montar una exposición en la Ciudad, esperaba que pudieras visitarme porque no creo regresar en mucho tiempo”. Lucía cuelga de inmediato y se llena de un profundo odio por aquel al que nombro el amor de su vida.

El Padre de Lucy entra a su habitación y le dice las palabras que cambiarán su vida, “Hija, si la felicidad no existe, fabrícala”. La joven no entiende,” ¿Qué quieres decir? ”,” Lucy, te he dado las herramientas para ser feliz, úsalas.”

La joven, recuerda que en su vida ella no ha tenido más ilusión que formar una familia con Ramón, y que para ello deseaba que su amado estuviera completamente bien. Ramón sufre de problemas cardiacos y era la total inspiración de Lucía para crear un órgano 100% confiable y que mantuviera la calidad de vida en familia que ella deseaba, así como eliminar todos los riesgos de que sus hijos heredaran ese problema como Ramón lo hizo con su padre.

Las palabras de su padre le retumbaban en la cabeza día con día, así que decidió regresar a su antiguo centro de investigación y pedir una oportunidad para retomar sus proyectos, la petición fue aceptada, una profesionista como Lucía siempre hacia falta. Ella llego con la única intención de modificar ese corazón que había venido trabajando años atrás… Lucía solo pensaba en recuperar su vida.

Erróneamente la joven pensaba que podía modificar los sentimientos de Ramón, así que comenzó a invertir todo su tiempo en la búsqueda de métodos para interconectar el corazón del famoso pintor con su cerebro e incorporar impulsos eléctricos que le ayudaran a modificar los sentimientos de su amado.

Los estudios de Lucy llegaron a ser bastante avanzados, ella estaba logrando su objetivo, hacía pruebas en donde por pequeños lapsos de tiempo, lograba influir en las sensaciones que el cerebro percibía. El proyecto estaba destinado a ser llamado el descubrimiento de la época, y comenzaban a sonar rumores de él por el mundo. Sin embargo, Lucía detestaba la idea, ella solo realiza el proyecto para beneficio propio, y por supuesto negaba toda posibilidad de que Ramón pudiera detectar sus intenciones.

El proyecto queda entonces escondido, Lucía continuaba investigando a escondidas de sus colegas y jefes, ella indica que no encuentra la manera de hacer que los impulsos emitidos por el corazón al cerebro sean plenamente seguros para el humano. Y sin embargo, avanzaba en la realización de sus investigaciones.

Han pasado cerca de 3 años desde que Ramón salió de la vida de Lucía, ella piensa que los estudios de su proyecto están muy avanzados y que es el momento de retomar contacto con el joven si es que quiere recuperarlo. Ella investiga y no le es difícil localizarlo, pues ahora Ramón Santillán Beltrán es uno de las llamadas revelaciones dentro de la Universidad de arte gótico más importantes de Europa, ha montado 2 exposiciones en conjunción con sus compañeros, y suena como una de las jóvenes promesas de este corte.

Lucia busca la manera de llegar hasta él, y emprende un viaje a Paris, Francia. Localizada la escuela y tras una hora de espera, Ramón llega. El joven se muestra sorprendido, nunca espero encontrarse con Lucía, y menos observarla tan cambiada, sus rasgos se habían endurecido, estaba significativamente más delgada y demacrada, y en sus ojos se había perdido la vitalidad que había cuando estaban juntos.

La joven no puede ocultar su júbilo, corre a abrazarlo y le cuenta lo mucho que lo ha esperado. Los dos pasan toda la tarde juntos, Ramón no deja de mencionar todos sus logros y los momentos que ha pasado en aquel hermoso lugar. Lucy no tiene mucho que contarle, así que su conversación se estanca. De pronto Ramón recibe una llamada que le ilumina la mirada, Lucy se pregunta quien le llamará, el joven solo agacha la mirada y le dice que tiene que partir, que sus clases comenzarán. Ella le pide volverse a ver y Ramón sin mucho ánimo accede.

Lucía permanece una semana en París y en transcurso solo ha logrado ver a Ramón en una ocasión. Él muestra total inaccesibilidad a ver a la chica, ella no entiende razón hasta que al buscarlo en su escuela, llega a la zona de exposición y encuentra a su amado con alguien más, al parecer Ramón rehízo su vida.

El impacto de ambos al verse es inmenso, Lucy se lanza con insultos y golpes a la pareja, la novia de Ramón no entiende la situación, él nunca hablo de su pasado a nadie además de que la joven era Francesa y no entendía los insultos que Lucía les propinaba. Ramón se encuentra en el momento más impactante de su vida, su pasado y su presente se confrontan y él no encuentra que hacer. Entre todo lo acontecido, Ramón logra detener la mano de Lucía que está a punto de impactarle un golpe a su novia, entonces siente un terrible dolor en el brazo izquierdo, no logra controlarlo y el peso de Lucy lo vence hasta llevarlo al suelo.

Ramón cae de dolor y se agudiza un profundo silencio, la novia de Ramón acude a él y Lucy intenta reanimarlo pero es inútil, Ramón está sufriendo un paro cardiaco. El joven es llevado al hospital de inmediato y después de ser internado los doctores comunican a las chicas que Ramón ha entrado en estado de coma.

Lucía esta devastada se cree culpable de la situación, la novia de Ramón llama a sus padres y ellos llegan al hospital y se alegran de ver a Lucy, la chica más maravillosa que su hijo podía tener a su lado. Ella cuenta a los padres de Ramón acerca de su proyecto, y les prometo curar a su hijo si ellos le autorizan llevárselo de Francia. Anaé, la pareja actual de Ramón es excluida de toda decisión.

El joven, inconsciente es trasladado a un hospital de su Ciudad natal. Lucía contacta a todos los especialistas con los que ha estado trabajando los últimos años y menciona del caso de Ramón; Lucía se siente culpable y al mismo tiempo veía en ese acontecimiento su posibilidad de adueñarse del corazón de Ramón, el amor de su vida.

Los especialistas no consienten la idea de arriesgar al joven a un prototipo poco probado, Lucía se aferra a la posibilidad y continúa perfeccionando su órgano artificial, su investigación dura 6 meses, meses que Ramón continua en estado de coma. En su equipo Lucía trabaja con un médico cirujano muy bueno, quien busca a toda costa ser reconocido por la sociedad como el mejor cirujano de época, y justo buscaba un proyecto como el que Lucía proponía para culminar su éxito profesional.

El Médico y Lucía pasan algunos meses más trabajando en el corazón artificial que les beneficie la vida a ambos. Después de un duro trabajo y un esfuerzo grande, Lucía logra convencer a los padres de Ramón de autorizar la intervención quirúrgica, ellos con el único deseo de volver a ver a su hijo caminar y emprender de nuevo sus sueños y sabiendo del gran amor que Lucy le profesa, acceden sabiendo que su hijo está en buenas manos.

Con todo listo para la intervención, el joven es operado. El corazón estaba casi listo, Lucy logro regular en gran medida los impulsos que este emitía al cerebro. Las autoridades del Centro de investigación en el cual Lucía y el Médico trabajaban, pidieron que en la intervención únicamente se remplazara el órgano y no se conectará al cerebro de Ramón pues era un evento de alto riesgo. Lucía logra establecer un acuerdo con el Médico y ambos omiten esta orden llevando a cabo la cirugía en su totalidad.

La operación dura más de 8 horas, nadie tiene noticias de Ramón, y con Lucía en el quirófano, se le aplica la reanimación al nuevo corazón del joven expuesto. Los signos vitales del paciente se establecen, su pulso aumenta y todo es un éxito total. La vida de Ramón esta salvada.

Después de 2 horas de observación, Lucy logra ver movimientos de Ramón quien acepta el órgano artificial con toda perfección, lo cual no le sorprende pues en realidad el órgano que Lucía creo fue hecho especialmente para él.

Lucy habla con el joven, le cuenta lo sucedido, y le dice “Tienes ahora el verdadero corazón que te pertenece, el que hice solo para los dos” Ramón está desconcertado pero en gran medida feliz porque según las noticias que había recibido, el problema que lo había frenado toda su vida se había terminado.

Durante las horas siguientes Ramón continúa en observación y se les comunica a sus padres la noticia, ellos están felices, Lucy había salvado la vida de su hijo. La prensa llega interesada por el acontecimiento y las primeras noticias no son más que reconocimientos y felicitaciones.

Ramón comienza a presentar fuertes dolores de cabeza, los médicos intentan regular los procesos para localizar la causa de sus malestares. Durante la revisión Lucy se percata de que todo ha salido tan bien que no encuentra razones para no intentar borrar de la memoria de su amado esos 4 años de dolor que ambos pasaron.

Anaé, después de no poder acercarse a su novio por meses logra ver en las noticias el acontecimiento y sin dudarlo se dirige al hospital en busca de Ramón. Al llegar Lucy es avisada que la joven se encuentra esperando y sin pensarlo dos veces informa a los médicos que se le van a aplicar impulsos eléctricos al corazón para intentar regularlo, en realidad Lucy busca controlar la parte de los recuerdos de Ramón en su cerebro, para que Anaé no represente un peligro en su proyecto de vida.

Lucy está a unos minutos de recuperar al amor de su vida, los impulsos eléctricos son aplicados, mediante un sistema de redes neuronales, Lucy sabe en qué momento habrá llegado a su objetivo y entonces podrá detener los impulsos. El pulso de Ramón aumenta peligrosamente, pero Lucy necesita más potencial en el cerebro de Ramón, los Médicos comunican que la situación se está saliendo de control, Lucy hace caso omiso y continúan estimulando al nuevo corazón.

10 segundos después de esta alarma, los signos vitales de Ramón se ven disminuidos, Lucy detiene la operación sin llegar a su objetivo, se trata de reanimar al joven y se logra estabilizar la situación. La vida del paciente tiende de un hilo, y la felicidad de Lucy se ve amenazada por Anaé.

Lucía sale para informar a los padres del joven la situación, el médico explica que todo está bajo control, pero Ramón esta delicado y permanecerá en observación. Lucía percibe la presencia de Anaé, pero al observarla ella está sentada en la sala de espera acompañada de un joven y un bebé de aproximadamente 1 año de edad.

La joven se para al reconocer a Lucía y acude hasta ella pidiéndole hablar un momento con Ramón, Lucy le explica que Ramón esta delicado y no puede recibir visitas, Anaé insiste y argumenta, “No quiero que algo le pase a Ramón y no conozca a nuestro hijo, él lo esperaba con mucha ilusión”. Lucy queda impactada, pregunta quién es el joven que la acompaño hasta el hospital y Anaé responde que es Claude, el mejor amigo de Ramón en la Universidad.

En ese momento se activa una alarma y se pide al equipo de médicos acudir a terapia intensiva, Lucy entra de inmediato y antes de llegar hasta Ramón, éste sufre un derrame cerebral. La vida del joven se desvanece ante los ojos de Lucy quien no da crédito a lo que sucede.

Ramón no resiste y pierde la vida al instante. Lucy cae desolada en llanto total, ha perdido al ser que más ha amado en su vida, ha matado al ser que más ha amado. Le arruino la vida y no consiguió su amor.

Los padres de Ramón son enterados de la cruel noticia y Anaé y Claude entrar a la sala de terapia intensiva con el niño en brazos, Lucy se encuentra tirada llorando la muerte de Ramón. Anaé se acerca y solo puede decir, “Gracias por haberme dado tu amor Ramón, éste es el angelito que tanto esperábamos, prometo cuidarlo por ambos, te amo.” Se retira del lugar con su hijo en brazos y Claude, el único en Francia que sabía de la existencia de Lucy en la vida su amigo atina en decir, “Felicidades Lucía, ya tienes el corazón de Ramón”.

“El amor no está en la frecuencia que emite el corazón, está en el alma y aun no se puede modificar”

Ecatepec, Estado de Méx a 1 de Noviembre 2009