lunes, 2 de noviembre de 2009

Cuento

Sánchez Altuzar Dulce Itzel
Extraña enfermedad
Laura es una joven llena de vida, sociable, risueña, con toda una vida por delante con apenas de 16 años de edad, hija única por cierto, por lo que esta un poco consentida por sus padres, ella se encuentra estudiando la preparatoria, 1° año para ser exactos.
Lorena la madre de Laura es una joven enfermera y su padre el Sr. Miguel es gerente de una empresa que vende aparatos biomédicos, aunque sus vidas son un poco apuradas siempre tienen tiempo para el hogar y claro para su hija que siempre se encuentra bien atendida, tiene todas las comodidades que cualquier joven de su edad pudiera desear y claro que una buena comida nunca le falta.
Desde hace un tiempo para acá Laura se siente mal, se marea, de repente no puede moverse, se siente extraña pero como siempre ella hace caso omiso ya que piensa que ha de ser por la presión de la escuela, ella sigue como siempre, sonriente hacia todos y sobre todo atenta con los demás, aunque a decir verdad a veces piensa que algo se encuentra mal, pero pues no dice nada a nadie sobre todo para no preocupar a sus padres.
Un día mientras tomaba su clase de Filosofía se siento mal y cayó desmayada, rápidamente fue llevada con el médico escolar, pero al incorporase en sí se encontraba blanca, toda pálida, por lo que los doctores llamaron a sus padres aunque ella insistía en quedarse a clases, sus padres al verla decidieron llevarla al hospital donde los recibió la Doctora. Juárez que insistió en que la joven pasara sola a la consulta y al contar lo sucedido en la escuela la doctora le pregunta por alguna sensación extraña o síntoma fuera de lo normal y la joven en ausencia de su madre le cuenta sobre sus mareos repentinos y la falta de movilidad en ocasiones por lo que la doctora le pide que regrese dentro de 15 días al consultorio pero que en ese tiempo observe y anote todos sus síntomas, cada uno de los mareos, dolores, desmayos que presente. Al salir del consultorio la doctora les comenta a los señores el procedimiento que tiene que realizar su hija y les indica la fecha y hora de la próxima cita.
Después de agradecer a la doctora por su atención, la familia se retira del hospital, comentando con su hija sobre sus malestares.
Durante esas dos semanas Laura se ve decaída, con más frecuencia se encuentra pálida, con un frio extremo, dolores de cabeza, asistía la escuela con gran apatía, le costaba mucho trabajo levantarse por las mañanas y mantenerse sonriente, se agita continuamente por lo que los padres deciden llevarla con la doctora tres días antes de la cita ya programada, la doctora al verla tan débil la retiene en el hospital e inmediatamente le manda a hacer análisis radiológicos, inmunológicos , clínicos, de todo, todo su organismo, mientras se esperan los resultados las enfermeras observan todos los comportamientos de la joven, la alimentan bien, pero aun así no se nota mejoría alguna, la joven no se veía nada bien, algo estaba muy mal con ella pero ¿Qué medidas debían tomar los médicos? Como se iba a saber si no se tenía idea de que pudiera tener por sus síntomas tan inespecíficos, pero se tenia la esperanza que al llegar los resultados de los análisis ya se pudieran tomar cartas sobre el asunto, pero desafortunadamente en los análisis todo se encontraba en orden ya que en los exámenes radiológicos no indicaban deformidad u enfermedad alguna, los exámenes sanguíneos estaban en orden, leucocitos, eritrocitos, plaquetas, todo estaba bien, los médicos la mantenían en observación, varios médicos las revisaron, los mejores especialistas de cada área y nadie le podía diagnosticar nada, la joven muy triste, decaída y enferma cada día que pasaba perdía la esperanza de vivir y sus padres preocupados por la salud de su hija, no les interesaba cuanto dinero se gastaran querían que se supiera que tenia su hija y alguna cura a ese extraño mal que tenia la niña. Pasaron pocos meses, si acaso fueron dos meses, pero los médicos no encontraban nada y Laura cada vez lucia peor, había días en los que se sentía de maravilla y ella se quiera ir a casa pero no la dejaban por que de repente le daba dolores de cabeza muy fuertes, había ocasiones en los que los dolores de estomago eran insoportables, a veces se retorcía involuntariamente, si no le dolía una cosa era otra.
Lo único que les quedaba a los especialistas era ver si se traba de un desorden genético, o molecular, pero aun no se tenía esa tecnología ni en ese hospital ni el país completo. Los doctores al comentar esto con los padres de la niña decidieron llevársela a algún otro país si era necesario para que la estudiaran genéticamente.
El padre estando dentro del mundo de aparatos biomédicos, investigo y cuales eran las últimas investigaciones que se estaban llevando a cabo y aparatos mas recientes que todavía no eran fácil de comercializar, y después de mucho investigar se entero que en Suiza ya era posible leer totalmente el código genético por lo que se comunicaron inmediatamente a un hospital en particular de Suiza donde a un gran costo se realizaban estos estudios , después de varias semanas de estudios notaron que una parte pequeña del código genético, en especial una parte insignificante de un gen se encontraba mal, no era mucha la deformidad de tal gen pero sin embargo esa pequeña anormalidad causaba todo lo que presentaba la joven, ya que al no tener ninguna otra cosa mal, se sabia que esa era la causa.
En esos tiempos que ya era posible leer el código genético completo aunque muy poco usado por el alto costo, ya se había avanzado más en el caso de anormalidades del mismo por lo que se estaba viendo en los mejores laboratorios del mundo como se podría modificar el material genético, ya se tenían avances notables pero aun no estaba la investigación completa.
Los padres junto con la joven que gracias a dios no empeoraba tenían todas sus esperanzas en encontrar alguna cura ya que ahora se sabia que la joven viviría pero poco a poco irían aumentándose los dolores a pesar que ya eran insoportables, solo con sedantes era controlada, así paso el tiempo, los doctores la dieron de alta, aunque necesitaba los mismos cuidados en casa, la mama de Laura se dedicó a cuidarla, a controlarle los dolores.
Laura al saber que su vida seguiría aunque con esa enfermedad decidió terminar sus estudios en casa, acabó la preparatoria abierta en tan solo 2 años, y entro a la universidad a distancia.
El Sr. Miguel que se mantenía al pendiente de las investigaciones, se le informó que las investigaciones ya estaban listas pero solo habían sido probadas en animales de laboratorio, el material genético podía ser modificado poco a poco hasta que todas la células contuvieran el material genético ya modificado, este proceso desde que la primera célula tuviera este material genético hasta que todas las células de organismo las tuvieran en animales pequeños se llevaba meses y se calculaba que en seres humanos se tardaría aproximadamente de dos a tres años. Este procedimiento seria un poco doloroso pero nada comparado al infierno que Laura había pasado durante los 10 últimos años de su vida.
El Sr Miguel comentó esto con su esposa y Laura de ya 26 años de edad, quienes al estar seguros que había funcionado perfectamente con todos los animales de laboratorio a los que se les había realizado aceptaron que Laura fuera la primera persona en la que llevara acabo la investigación sabiendo los riesgos de tal proceso, pero aun con la esperanza, por lo que volvieron a viajar hasta Suiza para aceptar que se realizara en ella tal avance.
Se mantuvo en observación y después de un año los síntomas empezaban a desaparecer, su color de piel regresaba a su normalidad, y a los tres años ella se sentía sin ningún malestar, se sometió de nuevo al análisis de ADN para ver si todo se encontraba correctamente, en el cual todo se encontró en orden.
Esta investigación se dio a conocer a los seis meses de ser terminada y comprobada con Laura, tiempo después se llevo a cabo con otras dos personas que presentaban algún mal genético y en ambos casos funcionó correctamente, por lo que de muy poco tiempo se empezara a usar para toda la población que lo solicite.
De esta manera Laura pudo olvidarse de tan fea y rara enfermedad y volver a realizar su vida sin dolores, ni angustia.
Este gran avance hasta ahora ha sido el gran alivio para las personas que padecen diferentes enfermedades ya conocidas, antes incurables; y otras más que hasta ahora son desconocidas, pero curables, gracias a esta investigacion ya utilizada por cualquier individuo que la necesite para su bienestar fisico, social y mental a la vez.

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